Cine-mundial (1916)

CINE MUNDIAL THE SUBMARINE PIRATE a Aglomeración de público a las puertas del teatro “Liberty,” de Seattle, en la noche del estreno del “Pirata Submarino,” película jocosa de gran sensación que hizo desternillar de risa al respetable. mayores desembolsos al principio, se limita a exhibir las películas de verdadero interés producidas por las casas que de mayor fama gozan, anunciándolas con profusión no sólo en las esquinas, sino en los diarios y casi todos los tranvías. Los programas se preparan en artísticos folletos de cuatro páginas, que muchos de los espectadores llevan a sus casas y enseñan a los amigos que encuentran. Las funciones son continuas desde el mediodía hasta las once de la noche, durante los siete días de la semana, y el teatro cuenta, entre otros atractivos, con una magnífica orquesta que da un concierto antes de empezar cada tanda. Todos los asientos están distribuídos de manera que permiten ver perfectamente el escenario, y el vestíbulo es amplio en extremo y de refinada elegancia. La taquilla, construída toda de vidrio, aparece emplazada en el centro del vestíbulo. No contenta con esto, la empresa ha ido todavía más lejos. Durante la representación de “Carmen,” todas las jóvenes acomodadoras vestían trajes a la usanza española de la época y, sino se comportaban con el gracejo y donaire especial de las cigarreras sevillanas que idealizó Merrimée, tampoco el público de Detroit es ducho en cuestiones andaluzas. Citaremos también que cuando se estrenó el “Clarín de la Paz,” varios individuos, en uniforme militar, se apostaron a las puertas del teatro, y las acomodadoras aparecían como enfermeras de la Cruz Roja. LOS VENDEDORES AMBULANTES Uno de nuestros colaboradores, que por lo general conoce a fondo los asuntos que trata, nos ha remitido el siguiente artículo, el cual insertamos por lo mucho que tiene de curioso: “Uno de los mejores medios para ganarse la vida consiste en dedicarse a vendedor ambulante de baratijas, que sirvan de adorno a la persona, de uso casero, o de utilidad general. Aunque hay muchas clases de vendedores ambulantes, me ocuparé preferentemente de aquellos que estén relacionados con el ramo de espectáculos al aire libre. El vendedor ambulante es por necesidad patrón de sí mismo, dueño de su tiempo, único perito y juez de las mercancías en que comercia, y su propio guía en la elección del lugar en que debe trabajar. Esta es la parte agradable del oficio.” “La experiencia enseña al vendedor ambulante que donde la sente se congrega puede ganar más dinero y hacerse oir más fácilmente por un público numeroso. Se le encuentra en las ferias provinciales, festejos ambulantes, parques teatrales y FEBRERO, 1916 El Vista parcial interior del teatro “Broadway-Strand” i de Detroit.’ toda clase de reuniones populares, siempre llamando la atención del úblico. Por medio de su elocuencia callejera y gestos expresivos, consigue despertar la curiosidad de los transeuntes acerca de sus mercancías, tales como globos infantiles, pitos, látigos, mondadores, relojes, alfileres de corbata, pedrería artificial, juguetes y artículos de novedad en calidad barata; plumas-fuente, aparatos mágicos, soldadores, mucílagos, objetos de cocina, artículos de escritorio, afiladores de lápices o cualquier otra cosa.” “El vendedor ambulante debe ser avispado, procurando situarse en lugares céntricos y concurridos para que su mercancía pueda apreciarse debidamente. Por lo regular lleva con él un mostrador plegadizo y portátil encima del cual abre la valija que contiene los artículos de su especialidad, y los va sacando a medida que los vende. A veces extiende sobre el suelo o la acera un tapete sobre el que distribuye sus mercaderías en forma atractiva a primera vista, y en la mano tiene una muestra que va enseñando al público curioso que se aglomera a su alrededor. Algunos vendedores ambulantes de mayores recursos venden sus baratijas y específicos desde un automóvil, mientras muchos otros transitan por las aceras de las calles, dirigiéndose a uno y a otro entre la muchedumbre presurosa, y se esfuerzan para conseguir que alguien les compre lo que ofrecen. Hay también otra clase de vendedores ambulantes que visitan de casa en casa, y a estos se les suele llamar corredores en los Estados Unidos.” “Solamente en Norte-América, se cuentan cientos de miles de personas que se ganan la vida de esta manera, y obtienen mayor lucro en su trabajo que los campesinos u obreros de la ciudad. Tal vez, leyendo este artículo, haya alguien que descubra en sí mismo cierta aptitud natural para dedicarse fructíferamente al oficio de corredor y vendedor ambulante, y que lo único que le falte sea algo de confianza o de práctica. Si tal persona sólo dispone de escasos recursos pero tiene empeño en mejorar la situación en que se encuentra, debe fijarse atentamente en todos los anuncios que vaya publicando CINEMUNDIAL relacionados con baratijas, debiendo dirigirse inmediatamente a los anunciantes cuyos artículos le inspiren interés.” “Para el vendedor ambulante dotado de práctica en su negocio, ya se encuentre en la América Central o del Sur, en Filipinas o en España, es indudable que CINE-MUNDIAL resultará de grandísimo provecho, para enterarle de las novedades que aparezcan en los mercados manufactureros, y para estar al corriente de la última innovación en su ramo.” A AENA N