Mensajero Paramount (1937–1938)

"EL CABARET DEL ESCÁNDALO" AL descubrir que su esposa Ruth lo enJ\ gaña con Frank Marsh (Harvey Stephens), el doctor Tindal (John Barrymore) fragua un plan del que resultará no tan sólo la muerte de la infiel, sino, lo que hará completa la venganza, el peor castigo que pueda caer sobre Frank Marsh: verse acusado de la muerte de Ruth y no hallar modo de infirmar las pruebas que aparecen en contra suya. Después de estrangular a Ruth, el médico coloca en la mano derecha de su víctima un dije que usaba Frank Marsh en la cadena del reloj ; hace desaparecer con el mayor cuidado toda huella delatora, y se dirige por último a una de las ventanas, en la cual pone la cinta que servía de señal a los amantes para sus citas. Acto seguido, sale a reunirse con el doctor Goodman (Leonard Willey), que vive en uno de los departamentos del piso de arriba. Los dos médicos se encaminan al lugar donde dan el banquete al cual debía haber asistido también la señora de Tindal, quien ,^ según dice éste a su colega, ha tenido a última hora que quedarse en casa debido a una fuerte jaqueca. Según lo había calculado el uxoricida, el dije que dejó en la mano de su víctima se convierte en indicio vehemente contra Frank Marsh, a cuya detención proceden sin demora las autoridades. Vera (Louise Campbell), hermana del acusado, logra inclinar a favor de éste al repórter Russell Kirk (Lynne Overman), quien, con su amigóte el detective McKinley (Charles Bickford) era uno de los más empeñados en buscar pruebas contra Frank Marsh. Jack Reed (J. Carrol Naish), propietario de un cabaret de lujo del cual es principal atracción su mujer Julia (Evelyn Brent), trata de evadir las pesquisas a que quiere someterlo el detective McKinley, que sospecha que esté complicado en el asesinato de la señora de Tindal. Aunque herido, Reed logra darse a la fuga, pero sólo para caer en manos del doctor Tindal, quien lo mata al operarlo. Mientras que la policía concentraba todos sus esfuerzos en buscar a Reed, el repórter Kirk examinaba de nuevo, una por una, y sin ánimo prevenido, todas las circunstancias del crimen ; haciendo lo cual llegaba a descubrir el modo como se había cometido. Confrontado con las pruebas irrecusables de su culpabilidad, el doctor Tindal se quita la vida. No dudando que el servicio que acaba de prestarle al probar la inocencia de Frank Marsh predispondrá a Vera en su favor, Kirk juzga llegado el momento de declarársele. Pero queda todo confuso y corrido cuando ella, contestando a una insinuación que con respecto a Kirk le hace el detective McKinley, dice que, aunque le quedará eternamente agradecida al repórter, no puede pensar en corresponderle a él ni a nadie, pues tiene ya novio : un oficial de la armada con el cual se casará dentro de poco. MENSAJERO PARAMOUNT pagina n Adolph Zukor presenta "El. cabaret del escándalo" ("Night Club Scandal") con John Barrymore, Lynne Overman, Charles Bickford, Louise Campbell, Elizabeth Patterson, Harvey Stephens, Cecil Cwnningham y Evelyn Brent — Dirección de Ralph Murphy — Guión cinematográfico de Lillie Hayward — Basado en una ohra teatral de Daniel N. Rubín — Fotografía de Leo Tover — Dirección artística de Bans Dreier y Earl Hedriclc — Montaje de la película por Archie Marshek — Fonografía de Philip Wisdom y Richard Olson — Decorados interiores de A. E. Freudeman — Dirección musical de Boris Morros — Un film Paramount hablado en inglés con rótulos explicativos en castellano. PARA EL RECLAMO Coloqúese en lugar aparente del vestíbulo un reflector que quede a la altura de la cabeza de la persona que ocupe el asiento que habrá entre dicho reflector y una pantalla puesta de manera que quede iluminada por él. Hechos estos preparativos, invítese al público, de viva voz o por medio de un cartel, a tomar parte en el concurso en el cual se darán sendas entradas gratis a las doce primeras personas cuyo perfil se asemeje más al de John Barrymore. La manera de determinar el grado de semejanza, será invitar a cada persona que quiera tomar parte en el concurso a que ocupe durante unos minutos el asiento mencionado, en tanto que un empleado del teatro traza en la pantalla, o me jor dicho, en la hoja de papel que se habrá colocado encima de ésta, una línea que siga la del perfil que aparezca, proyectado por el reflector. Este perfil se cotejará en seguida con el de John Barrymore, que se tendrá allí, arreglado en forma adecuada a que la semejanza o desemejanza salte a la vista al hacer la comparación. PARA EL ANUNCIO % La alegría de la vida nocturna de Nueva York sirve de marco a un crimen perfecto. # El médico a quien los celos convierten en homicida, necesita, para completar su venganza, que sea el amante de su mujer quien aparezca culpado. 9 Todas las apariencias condenan al hombre contra el cual tramó un marido celoso terrible venganza. Pero, cuando ya marcha hacia el patíbulo. . . Vea "El cabaret del escándalo." % John Barrymore, el actor sin rival, en un drama de misterio enmarcado en la vida nocturna del Broadway neoyorquino. 9 La señal que en la ventana llamaba a citas de amor, se ha convertido en prueba que llevará al cadalso a un inocente. # La película en que se combinan la esplendidez de la vida nocturna de Nueva York y el absorbente interés de un drama de misterio. JOHN BARRYMORE, Lynne Overman, Charles Bickford, Louise Campbell, Elizabeth Patterson, Harvey Stephens