Mensajero Paramount (1937–1938)

"¡Viva el balanceo!" con george burns y gracie allen EXASPERADO por la completa falta de aprovechamiento de las mujeres de su familia en los estudios, el viejo Alden (Tully Marshall) dispone que el colegio que constituye la parte principal de la herencia quede en fideicomiso hasta tanto no haya una Alden que apruebe todos los cursos y salga graduada. Ocurre esto en 1738. Según la voluntad del testador, si pasado un plazo de doscientos años no se ha cumplido la condición impuesta, el colegio mismo será el heredero de todo el patrimonio de los Alden. Llega el año de 1938. Auxiliada por Bud Brady (Bob Hope), al cual ha contratado por $10,000 con este objeto, la nada talentosa y desaplicadísima Gracia Alden (Gracie Allen) logra terminar sus estudios, evitando así que el colegio, convertido en magníficamente dotada universidad, y los bienes en él vinculados salgan de manos de la familia. Lo primero que hace Gracia apenas se ve en posesión absoluta de la herencia es establecer una cátedra de Arte de Enamorar, para la cual nombra a Mable (Martha Raye), y contratar a Ben Volt (Ben Blue) como profesor de gimnasia. Martín Bates (John Payne), uno de los estudiantes, que es novio de Ginna Ashburn (Florence George), la hija del decano, acude a Huberto Dash (Edward Everett Horton) para que en su carácter de miembro de la junta de síndicos de la Universidad salve a ésta del desastre a que la lleva Gracia Alden. Dash, que es un misógino, queda verdaderamente aterrado cuando advierte que Gracia ha puesto los ojos en él, y más todavía al convencerse de que ni sus propios esfuerzos ni los de su secretario Jorge Jonás (George Burns) logran tener a raya a la apasionada y resuelta muchacha. En tanto que Mable practica con Bud Brady las teorías que explica en su cátedra, Betty (Betty Grable), Jackie (Jackie Coogan) y otros estudiantes forman parejitas que son prueba elocuente de que las enseñanzas de la aprovechada catedrática están resultando muy fructuosas. Gracia consigue al fin lo que en un principio hubiera parecido imposible, o sea, que Huberto Dash se enamore de ella y le dé palabra de casamiento. Pero a tan insigne triunfo sigue inesperado contratiempo : el consejo de la Universidad pone en duda la validez del grado conferido a Gracia y ordena que presente nuevo examen. Aunque Bud Brady trata de sacarla del mal paso equipándola con unas gafas y un bolso de mano que forman aparato radiorreceptor merced al cual podrá ella oír y hacer pasar por suyas las respuestas que él dará a las preguntas del tribunal examinador, el ardid fracasa, debido a que Gracia sintoniza mal y oye la música de una banda militar en vez de lo que Bud le está diciendo. A pesar de esto, la interesada queda muy satisfecha; pues si es verdad que pierde el colegio y con él toda su fortuna, no es menos cierto que ha logrado el amor de Huberto Dash, que es, después de todo, lo que a ella le importa. MENSAJERO PARAMOUNT Adolph Zukor presenta "¡Viva el balanceo!" ("Co llege Swing" ) con George Burns y Gracie Allen Edward Everett Horton, Florence George, Ben Blue Betty Grable, Jackie Coogan, John Payne, C'ecil Cun ningham, Robert Cummings, Skinnay Ennis, los Her manos Slate, Bob Mitchell y el Coro de St. Brendan — Guión cinematográfico de Walt.er DeLeón y Francis Martin — ■ Basado en la adaptación hecha por Frederick Hazlitt Brennan del argumento original de Ted Lesser — Fotografía de Víctor Milner — Dirección artística de Hans Dreier y Ernst Fegté — Montaje de la película por LeRoy Stone — Fonografía de Harold Lewis y Howard Wilson — Vestuario a cargo de Edith Head — Decorados interiores de A. E. Freudeman — Dirección coreográfica de LeRoy Prinz — Dirección musical de Boris Morros — Canciones originales de Frank Loesser, Hoagy Carmichael, Manning Sherwin y Burton Lañe — Asesor musical, Arthur Franklin — Dirección de Raoul Walsh — Producción de Lewis E. Gensler — Un film Paramount hablado en inglés con rótulos explicativos en castellano. PARA EL RECLAMO 0 La parte principal que corresponde a los bailes modernos en muchas de las escenas de "¡Viva el balanceo!", se presta para llevar a cabo multitud de reclamos. Uno de ellos sería exhibir en el vestíbulo del teatro o en cualquier otro lugar público adecuado a este intento, como el escaparate de una tienda desalquilada, por ejemplo, dos o más parejas que bailen el college swing. En los intervalos, uno de los mismos bailarines o una persona especialmente encargada de ello, se dirigirá a los espectadores para hablarles de la película "¡Viva el balanceo!". Podría también arreglarse, con alguna academia de baile o coreográfico, un concurso para distribuir uno o más premios entre las parejas que mejor bailaran el college swing. O Todas las fotografías cuyos números damos a continuación son excelentes para anuncios o reclamos cooperativos con casas de modas: P2403-32, P2403-52, P2403-37, P2403-50, P2403-51, P2403-35, P2403-47, P2403-42 y P2403-28. PARA EL ANUNCIO % Un film en que la juventud derrocha su divino tesoro de alegría. £ "¡Viva el balanceo!" es el film para el que quiera divertirse. % ¿Quiere usted pasar un rato divertido? Vea "¡Viva el balanceo!" % Un gran éxito de risa, de música, de baile y de vibrante juventud. 9 No lo dude: "¡Viva el balanceo!" es su película para hoy. # Diez estrellas y una constelación de las coristas más lindas de Hollywood en "¡Viva el balanceo!", un triunfo de música, de baile, de belleza, de alegría y de hilaridad. MARTHA RAYE, BOB HOPE, Ben Blue, Edward Everett Horton, Betty Grable, Jackie Coogan, Florence George, John Payne, Robert Cummings, Skinnay Ennis y los Hermanos Slate • dirección de Raoul Walsh P AGÍ KA 13