Mensajero Paramount (1927)

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MENSAJERO PARAMO UNT novato a quien habían tratado con tanta desconsideración v brutalidad, seria nada menos que el ejecutor de su derrota ! Mas, no anticipemos los acontecimientos, y continuemos el hilo de nuestra historia, pues desde el ingreso de Jack Stone al equipo de Colton hasta su victoria definitiva, suceden hechos y cosas dignos de ser narrados y conocidos. Mientras entrena en el equipo a las órdenes de Lumpy Goggins, coacli del Colton, de quien se hace íntimo amigo, éste le invita a ayudarle en la distribución a domicilio de las botellas de una compañía lechera, con lo cual ambos piensan ganarse los estudios en el Colegio. Jack acepta la proposición de su amigo y es curioso ver a nuestro novato andar por las mañanas por las calles de College City dejando una botella de leche en cada puerta, o arrojándosela a su amigo Goggins como si fuese un balón de fútbol. Todo marcha a pedir de boca para el repartidor de leche hasta que los estudiantes de la Universidad del Estado se dan cuenta de la ocupación matutina del novato. Las burlas y las mofas arrecian, por ese motivo, en forma tal, que Jack se dispone a administrar un correctivo a los burlones. Enterada Luisa de que Jack es un corredor de nota, un día, le invita a su casa para pedirle que substituya a otro corredor en la carrera de cien metros que ha de celebrarse en la Fiesta de Caridad de la vecina población de Owensburgo. Por satisfacer los deseos de la joven, con quien seguramente ansia repetir la escena del beso, aunque en más favorables circunstancias, Jack acepta tomar parte en la carrera. . . y resulta vencedor, con lo cual acaba de captarse la amistad de Luisita, muy a pesar de Daniel, quien se pone de acuerdo con sus compañeros de equipo para impedir, por cualquier medio, que el nuevo quarterback del Colton tome parte en el juego decisivo de fútbol de la temporada. Valiéndose de una infame calumnia, cual PAGINA 8 es la de hacer público el hecho falso de que Jack había recibido el premio de doscientos dólares ofrecidos al vencedor por el comité de la feria de Owensburgo, del cual Luisita formaba parte, las autoridades del Colegio Colton despiden a Jack del equipo, con lo cual le imposibilitan para tomar parte en el reñido partido entre Colton y Estado. Llega, por fin, la víspera del gran día en que los dos equipos rivales van a medir sus fuerzas, y Jack se dispone a hacer buena la promesa que un día hiciera a su padre, esto es, sacar triunfante al equipo de Colton, para cumplir otra promesa hecha por Elmer Stone veintisiete años antes a la que por ella fué su esposa. A la mañana siguiente, el boletín del Colegio, redactado por los mismos estudiantes, publica la sensacional noticia de que Jack Stone ha sido descalificado para tomar parte en el juego de fútbol, por haber aceptado un premio en metálico en la carrera de Owensburgo. A fin de que no haya dudas a este respecto, el periódico publica en la misma página en que da la noticia, la reproducción fotográfica de la bandera en que se ofrece el premio, y al pie de ella el retrato del vencedor. Al ver la fotografía, Jack recuerda que la única persona que tomó una instantánea durante la carrera fué Luisa, y a ésta achaca, de consiguiente, el joven quarterback la traición, sin imaginarse que en el mo mento que hacía tan infundadas suposi dones, Luisa estaba echando en cara ; Daniel, en defensa suya, su indigno proceder. A fin de exonerar a Jack de toda sospecha de culpabilidad en el asunto que tan injustamente ocasionó su descalificación, Luisa se dirige sin perder tiempo en busca del presidente del comité de la feria de Owensburgo, para que éste atestigüe, ante el rector del Colegio, que la acusación es absolutamente falsa. Mientras tanto, Jack se dirige al alojamiento de Luisa situado en los mismos terrenos de la Universidad ] del Estado, mas no hallándola, aumentan sus sospechas. Deseoso de limpiar de su apellido la mancha del deshonor, Jack "decomisa" un Ford y como alma que lleva el diablo, se lanza en busca del presidente de la feria, a quien no encuentra por haber salido un minutos antes con Luisa. En el entretanto, en el campo de fútbol la lucha entre Colton y Estado sigue empeñadísima, llevando el equipo del segundo colegio la ventaja por varios tantos. Desde una de las gradas, Luisa espera impaciente la llegada de I Jack, a quien varios emisarios buscan por todas partes para enterarle de su reintegro en el equipo, después de probada su inocencia. Por fin el quarterback hace su aparición en el campo de fútbol y gracias a su formidable juego, pronto convierte lo que iba a ser una derrota inminente en una decisiva victoria. Cumpliendo su promesa, Luisa devuelve el distintivo del Estado, que llevaba prendido en el pecho, a Daniel, y en su lugar prende en él el que sonriendo le entrega maliciosamente Jack, el cual no es otro que la chapa de latón que la compañía lechera de College City entrega a sus repartidores para su identificación. Como se verá, la victoria del quarterback del Colton no podía ser más completa y su venganza más humillante para el capitán del equipo del Estado. FIN.