Cinelandia (July 1927)

Página sesenta y ocho Pola Negri (Viene de la página veinticuatro) de egoísmos dedicó toda su vida, todos sus momentos, anhelos y mimos, al incomparable Rudy que logró cautivarla y rendirla a sus piés, hasta no ser dueña de su voluntad. —TEn el preludio de este gran amor— dice una de sus confidentes—Valentino se apartó de su lado para marchar a Nueva York. Cuando tomó asiento en el tren, Rodolfo iba lleno de vida, vigoroso y optimista, habiéndole prometido que regresaría. Pero Pola, quizás presintiendo la separación definitiva, se mostró inconsolable, le echaba de menos en su vida solitaria, recordando sus caricias y sus frecuentes enojos que tenían el encanto sublime de la reconciliación. Pero la Intrusa se encargó de romper repentinamente el idilio. Cuando Pola recibió la desconsoladora noticia de la muerte de Rodolfo, que posponía indefinidamente su retorno, la alegría del vivir huyó de su alma. Como una pequeña lloró hasta rendirse de cansancio, devorando así la hiel que amargaba su existencia. Vencida por el destino clamaba desesperadamente por un poco de alivio espiritual. . . . Y fueron pasando los días; todo el mundo creía que Pola seguía llorando la muerte de Rodolfo. Por eso fué grande la sorpresa cuando se descubrió su presencia a bordo del trasatlántico “Aquitania” con dirección a Europa y en compañía del “Principe” Serge Mdivani. Y ante la espectación general ella misma anunció su próximo matrimonio. Y aquí va su última declaración: “He vivido muy sola en el mundo He tenido cuanto con dinero se puede comprar, a excepción de un amigo verdadero y de un compañero selecto. No creo en la felicidad de un matrimonio de dos artistas. Con un solo temperamento artístico en una familia es más que suficiente. Jamás he pensado en casarme porque el hombre sea guapo o porque tenga pelo ondulado y sedoso. La felicidad debe fundarse en bases más firmes. Sin. embargo, hubo mucho tiempo, como es natural, que pensaba yo distinto a como pienso ahora. “Siempre he sido muy desgraciada en mis amores. . . . Sin embargo, creo que ahora seré feliz. Serge ha sido muy bueno conmigo. Mi amor por él se manifestó repentinamente, aun cuando lo conocía desde hace mucho años. . . Yo adoraba a Valentino y no es falto de reverencia a su memoria el que vaya a casarme con Serge. “Nunca amé a nadie como a Serge; ni a mi primer esposo; ni a Chaplin, ni a Valentino!” Como se ve todas esas desconcertantes declaraciones de Pola a propósito de sus CINELANDIA amores, no vienen a significar sino «el temperamento pasional de esa mujer. Y es posible que hasta ella misma, serenamente, no pueda contestar quien ha sido el verdadero amor de su vida. ¿Cual de todos constitutyó su pasión, la única gran pasión de toda mujer? ¿Fué acaso aquel joven pintor que murió en sus brazos en un pueblo cercano a Varsovia? ¿Fué el Conde Eugenio de Dombski que tuvo el poder de fascinarla en un instante? ¿Fué el genial Chaplin que iguala en temperamento y en fatalismo para el amor a la misma Pola? ¿Fué Valentino, el artista más sugestivo de Cinelandia, que rindió a sus piés a millares de mujeres? o ¿Es este “Principe”” Mdivani, que la conoció desde pequeña y que ha mantenido por Pola una pasión de muchos años? . . . ¿Quién lo sabe? . . . Yo sólo me aventuro a decir que Pola es una mujer humana, demasiado humana. Dolores del Río (Viene de la página cincuenta y sets) alas, y luego, sobre la falda de seda negra, se deshoja en flor, dejando al aire "loco de perfumes. (9 Este ha sido el ultimo set. Aguardaba con temor que lo cambiaran, y empavorecía pensando en ese beso final que rubrica un noventa y nueve por ciento de las producciones cinematográficas. Por fortuna para todos, la película termina del mismo modo que “Resurrección,” la obra de Tolstoi: en la sórdida ausencia siberiana, hasta donde llega el Príncipe para readquirir el espíritu, perdido en los brazos de mil mujeres hermosas. Y) E E Rod la Rocque se depoja del chaquetón de piel, la camisola ruda, las botas de monte. Cruza en la penumbra el cuerpo semidesnudo de una mujer anónima. Dolores del Rio es llamada para fotografiar “rostros,” y otra vez, quizá la última, se la ve llorar. . . . Mientras tanto, un utilero desentona su risa de rufián, un hombre se desviste, tres 0 cuatro mujeres se integran al grupo, y el Director de Escena rumia goma de mascar. ——Después de todo—nos dice por la última vez—vale la pena llorar de cuando en cuando. Si se piensa bien, se adquiere el convencimiento de que el sabor de una lágrima, con todo y ser salobre, endulza la burguesía de nuestro calendario, y aquieta un tanto al Corazón... .. Todas las siluetas se fugan de improviso. Alguien se crucifica: es Ella, que abre los brazos para ponerse el abrigo. El Correo de Hollyy (Viene de la página sese La de Lon Chaney, MetroMayer, Culver City, Californ Tom Mix y Dolores del R Studio, Hollywood. No; no. enviar el equivalente de los 25. americanos en estampillas, a sean americanas. Para ped fotografía a los actores hay que el valor en efectivo. María Cristina, La Haba direcciones ya aparecen aqui; . son: Gilbert Roland, United Hollywood. Pola Negri, Pa: Hollywood. Rita Carewe, In Pictures, Hollywood. q Inconsolable, Ponce, Puerto cútiz de Rodolfo Valentino e y hermoso. La mujer qu arrodillada junto a su lecho es Pola Negri, su novia. L películas de Valentino son, cronológico de aparición: Lo jinetes del apocalipsis, El she y arena, Monsieur Beaucaire del sheik. Rodolfo era. simpático y agradable en la vid Guacolda, Santiago de Ch Cody, casado actualmente col Normand, se divorció de Dor ton, quien es hoy día la esposa € Hammerstein, productor y € teatral. Lew Cody nació el 2 de 1885. E HIPNOTISM ¿Desearía Ud. poseer aquel poder que fascina a los hombr mujeres, influye en sus pensamil sus deseos y hace del que lo posee de todas las situaciones? La Y corporales necesidad de drogas. amistad y el amor de otras | aumentar su entrada pecuniaria, ' sus anhelos, desechar los pens enojosos de su mente, mejorar l y desarrollar tales poderes magn le harán capaz de derribar cuan culos se opongan a su éxito en de emplear ese poder para MN condición en la vida. Ha recibi siasta aprobación de abogados hombres de negocios y damas d sociedad. Es benéfico a tod No cuesta un centavo. Lo en para hacer la propaganda de instituto. y Escríbanos hoy pidiéndonos el li Sage Institute, Dept. 7 de PIsly, 9, Paris VIIL