Cinelandia (February 1929)

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Otro actor bien conocido y admirado por los fanáticos del cine, acaba de casárse decepcionando asi a un sin fin de admiradoras de todas partes del mundo. La boda de Reginald Denny de Universal, vino a sorprender a la mayoría de sus amigos, que no esperaban que este divor ciado cayera víctima otra vez de los flechazos de Cupido: El nombre profesional de la novia es Betsy Lee. UENTOS por Galo Pando Dolores cenando juntos en elegantes cafés apartados de Hollywood. Pocos deben saber seguramente que ésta será la tercera aventura matrimonial de John Barrymore. En 1910 casó con Katherine Corri Harris, hija de una distinguida familia, de quien se divorció en 1917. Un año después volvió a casarse con Blanche Oelrichs, famosa como poetisa y escritora. De este matrimonio hay un niño, habiendo John obtenido el divorcio hace un año. John Blythe Barrymore, de 46 años, según declaró al sacar licencia, pertenece a una familia de gente de teatro, por herencia materna y paterna. Igual cosa puede decirse de Dolores Costello, hija del actor Maurice Costello, quien fué el primer galán joven del cine americano, un popular muchacho, hace diez y ocho años, de pelo ondulado negro con un mechón blanco en la frente, que aparecía a menudo junto a Norma Talmadge, Florence Turner, etc. El matrimonio de John y Dolores se acaba de realizar a principios de diciembre y probablemente pasará algun tiempo antes que puedan hacer un viaje en su luna de miel, pues Dolores está aun filmando su última película para Warner Brothers. Recordaremos que esta unión fué causa de que el padre de Dolores, el gran actor Maurice Costello, se separase de su esposa, pues él se oponía firmemente a que su tierna hija se casase con Don Juan. UNQUE alejada casi definitivamente de la pantalla, Mae Murray pasará a la posteridad por los muchos hechos pin Muy ufano se debe sentir el célebre “Don Juan” Barrymore de haber conquistado a la bellísima Do lores y haberla hecho su tercera esposa. Desde la filmación del “Sea Beast” en que aparecieron juntos ya hace muchos meses, Barrymore ha venido cortejando a Dolores, aunque se negaba a admitir que estaban comprometidos a casarse. Dicen que a la tercera vez va la vencida. Esperaremos. . . . Pero es casi seguro que pronto podremos dar la noticia de la separación de estos amantes de la pantalla que tomaron la cosa en serio. torescos que le ocurren día a día. En nuestro número anterior nos ocupamos de las aventuras relacionadas con la casa que había comprado, pero, de entonces acá, un mes en total, ya han ocurrido muchas cosas más. Apenas paralizado momentáneamente ese juicio, otra persona llevó a los tribunales a Mae por un asunto importantísimo: ¡un perro! Discutiendo la propiedad, el precio de compra, el pago, etc. Mae Murray debió volver a los estrados a carearse con el perro y con el dueño de él. “También se arregló esto. Pero entre tanto, la deuda relacionada con su propiedad siguió adelante, y la justicia, representada por el Diputado-Sheriff Thompson, tomó posesión de la cuenta bancaria de la actriz y de algunas cosas de su propiedad. Estaba el representante de la ley cumpliendo la amarga tarea embargadora en la flamante mansión, cuando el Príncipe M'Divani llegó a la casa, en su regio Rolls Royce, maquillado con frondosa barba, después de un día de trabajo como “extra” en algún estudio. No le hizo gracia la presencia del sheriff, sobre todo cuando supo de que el automóvil también iba a ser embargado, y las emprendió a golpes con aquel, posiblemente confundiendo de una manera lamentable, a Rusia, (Va a la página 70)