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por
Dario Varona
un hecho comprobado hasta la saciedad, aunque no es menos cierto tampoco que las panaceas con que hasta el presente se ha pretendido resolver el problema, dejan mucho que desear y están muy lejos de ser una solución. Mas el descrédito de esta milenaria institución no ha llegado en ninguna parte del mundo — con excepción de Rusia, por supuesto — al grado que ha alcanzado en Hollywood. Como ya apuntamos más arriba, hay por estas latitudes gente que semejan niños jugando a casarse. No hace un mes todavía se anunció en un periódico local, el octavo enlace de una señora, y según decía el diario que daba la noticia, jamás había enviudado. Queremos hacer constar, sin embargo, que esta campeona matrimonial no pertenecía al grupo de artistas de cine. Conocemos personalmente, sin embargo, a una semiestrella que se ha divorciado ya seis veces y va camino de la séptima.
*A qué se debe el Galo porcentaje de divorcios registrados entre los artistas cinemáticos ? Difícil sería responder a esta pregunta en forma categórica, Por otra parte, no es nuestra intención hacer un estudio de sociología, sino
Empezando por abajo: Monte Blue de Warner, Vilma Banky de U. A,, Wallace Beery, Dolores del Río de U. A., y Richard Barthelmess de First National.
apuntar el hecho y señalar informativamente, los casos de mayor excepción, ya en un sentido ya en otro. No hay duda de que el relajamiento de los vínculos morales que cada día señalan los sociólogos de este país con alarma creciente, es una de las causas del fenómeno que nos ocupa. Otra determinante de trascendencia es la indole de la profesión misma y el fausto en que viven los artistas. Por último podría señalarse también el temperamento de estos artistas poco propicio a la vida hogareña y refractario a la regularidad y monotonía de la vida marital. Huelga decir que hay otros muchos factores, comunes a todos los estados de la Unión, que influyen además de las citadas. De estos podrían indicarse como capitales, la independencia económica de la mujer, la excesiva libertad de las costumbres, etc. Pero noto que me voy poniendo demasiado serio y no era éste mi propósito inicial.
A continuación nos proponemos reseñar algunos matrimonios de los más destacados de la colonia, señalando al paso, cuáles han fracasado definitivamente y cuáles ofrecen perspectivas más optimistas. Excusado es decir, que no aparecerán aquí más que un número limitado, entre los cuales no se encuentran los casos más extremos. Aunque detestamos las profesías, aventuraremos no obstante, algún vaticinio que probablemente resultará fallido.
Empecemos por el que urbiet orbe, ha sido proclamado el máximo actor que hasta ahora nos había dado la pantalla. ¿Necesitaremos decir que nos referimos a Charlie Chaplin? Los genios nunca fueron maridos modelos y Charlie ha venido a confirmar la regla una vez más. Su primera aventura matrimonial tuvo como protagonista a Mildred, Harris, artista cinemática que solia hacer sus in
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