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Un grupo de amigos visita a la célebre familia John BarrymoreDolores Costello con el fin de darle el visto bueno al primogénito de esa unión estelar. Detrás de la mamá podemos ver al tío del bebé, el actor-direector Lionel Barrymore. Abajo, presentamos a Skeets Gallagher, de Paramount, feliz padre de otro nuevo bebé de
Cinelandia.,
bebés de
HOLLYWOOD
A NUEVA generación de Hollywood está causando dia verdadera sensación.
Hasta hoy fué costumbre, o una especie de convenio, entre las estrellas, ocultar cuidadosamente la noticia de que ellas o ellos eran casados y ni por broma se atrevían a decir que tenían prole. Gloria Swanson tuvo escondidos a sus hijos por mucho tiempo. Y cuando Mae Murray regresó de Europa quizo que su consorte, el príncipe M'Divani, y su hijo recién nacido la siguieran en otro vapor a fin de que los reporters no supieran que era madre y evitar que se divulgara la noticia. No es precisamente que se avergonzara de la maternidad, sino que Mae tenía que considerar su atracción ante el público.
Por aquellas calendas creían las estrellas que su popularidad menguaba si los. fanáticos admiradores llegaban a saber que ellas o ellos, según el caso, eran llamados “mamaíta” o “papaíto”, como cualquier otro mortal. Fueron también los magnates de los estudios responsables por el misterio en que se ha tenido a los herederos de las estrellas.
—¡Oh, nó! — decían los grandes soberanos de la industria a sus estrellas— El público os imagina fascinadores, diferentes, libres de lazos matrimoniales. Resultado: que las celebridades de la pantalla los escucharon obedientes. La cigúeña, ese pajarraco que en el folklore de este país es el encargado de traer los bebés a los hogares, no se atrevió a rondar por las casas de las estrellas.
Por eso ha causado sensación descubrir una generación de chiquillos—hace
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POR VIRGINIA LANE
dos años no habrían causado sensación, sino escándalo; pero hoy día es el orgullo de la colonia cinemática.
¡ Hollywood ha enloquecido con los bebés! Por todos lados se han abierto tiendas exclusivas para ropa de infantes. $ han importado ropones para bautizo exquisitamente bordados Los importan de Irlanda y España. De Alemania y lo Balkanes importaron cobertores para cuna estampados con di bujos de colores alegres; también se trajeron sonajas. Y de la América hispana, así como de México, se han traído ju guetes y canastillas de ropa para el recién nacido. Pare que todo el mundo se ha congregado para vestir y divertira los niños del reino cinematográfico.
Daremos un vistazo a un grupo de chiquillos robustos así como a sus pr dres. Empezaremos por Norma Sheartr. Cuando esta estrella contrajo matrimo nio con Irving Thalberg, recuerdo qu dijo que primero sería la señora de Thalberg y la carrera artística sería pr ra ella algo secundario. Decisión q aplaudí porque ya teníamos muchas t* trellas que consideraban el matrimonl solamente como una parte de su carreí artística.
Y puóea no quería poseer solament una casa; cuatro paredes; sino UI ambiente de hogar, de familia. Queñ oir la risa y el correteo de niños. Y? deseo se le cumplió. Dicen que su ni gorgotea y cloquea (o como quiera lle marse a esos ruidos que son el lengual de los niños antes del uso de la palabr