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MEXICO ACLAMA
UA LOS ASTROS DE HOLLYWOOD
El artículo que publicamos
a continuación fué escrito
por W. Wilkerson, editor del
“Hollywood Reporter”, desde la capital de México.
A MAS grande ovación que jamás se haya tributado a una persona o a un grupo de personas, fué la que tributó México a la embajada cinematográ
fica que llegó de Hollywood recientemente a esa capital. El que escribe estas lineas presenció la inolvidable recepción que ofrendó New York a Lindbergh al regresar de su famoso vuelo al traves del Atlántico. En número, es indudable que la multitud que recibió a Lindbergh fué mucho mayor pero el entusiasmo de las muchedumbres de México no admite punto de comparación. La cinceridad de las aclamaciones populares que tuvieron lugar en México no admiten punto de comparación.
Las demostraciones, desde el momento en que la embajada artística de Hollywood alterrizó en el aeródromo Municipal y durante todos los instantes de su permancia en la ciudad, constituyeron el tributo más sincero y entusiasta que han rendido a un grupo de personas su admiradores populares y el acontecimiento más grande que ha ocurrido en la historia de la cinematografía de Hollywood.
Cuando los aviones aterrizaron en el aerédromo los pasajeros descubrieron al
Hacia el hotel Reforma por las calles centrales de la gran capital mexicana las multitudes aclamaron el paso de los astros en una manifestación que ha contribuído poderosamente a cimentar la amistad de México y Norteamérica.
Mickey Rooney fotografiado con el presidente de México, General Avila Camacho, durante la visita de las estrellas de Hollywood, a la capital de México.
traves de las ventanillas a una muchedumbre con los brazos en alto, agitando ramos de flores y saludando con frenesí Toda la policía de México fué impotente para abrir paso a los viajeros. Durante el recorrido hacia el Hotel Reforma parecía que la multitud que aguardó en el aeropuerto se agregó a los que se alineaban a lo largo de las calles y corriendo en pos de omnibuses y automóviles recorrió todo lo largo de la distancia haciendo la impresión de hallarse todo México presente en la recepción.
LLUVIA DE FLORES
La multitud repitió mil veces el nombre de sus astros favoritos cubriéndolos con un diluvio de flores, luchó infatigablemente por tocarles las manos y reveló a gritos su entusiasmo sin cansarse nunca...El paso de la procesión se hizo cada vez más difícil. La policía montada, los guardias de motocicleta y varios destacamentos de ejército fueron impotentes para mantener el orden y se produjeron incidentes resultando heridos entre los que se empeñaban en llegar a los automóviles.
La llegada al hotel ocasionó un nuevo desbordamiento de entusiasmo. Las calles estaban infestadas de público en todas direcciones y la gritería era incontenible. El que esto escribe ha presenciado varias recepciones populares en diversas ciudades de Norteamárica en ocasiones similares y todas pasarían inadvertidas al lado de la de México.
(va a la página 42)
En el Aeródromo Municipal de México se congregó una gran muchedumbre que rompió los cordones de la policía y se lanzó a dar la bienvenida a la embajada artística de Hollywood.
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