Cine-mundial (1921)

VESTES CINE-MUNDIAL we NTN NOSSO REÉERRERENNIENDN SS / NES, PS Cronica de la Habana El establecimiento de la primera compañía manufacturera de películas en la Perla de las Antillas después de vencer una serie de tropiezos y dificultades sin cuento — La ”Golden Sun Pictures” — El Director de CINE-MUNDIAL en la Habana — La “Mutua” de nuevo en acción — Exportadores neoyorquinos de paso en Cuba — Actividades cinematográficas. O CABE dudar que, de poco tiempo a esta parte, dió un formidable paso de avance la producción cinematográfica. Son varias ya las casas que se dedican a la impresión de películas. Pero hasta ahora sólo se habían conseguido algunos intentos de escasa importancia, aunque dignos de elogio porque ellos preparaban el terreno para el ulterior desarrollo del arte mudo en este país. No quiere esto decir que hayamos llegado a la perfección y que estemos en condiciones de acoger con desdén las enseñanzas que nos vengan de fuera. Nada de eso. Pero estamos en buen camino, y ésto, sin disputa, es mucho. Todos los países han tropezado con muy serios inconvenientes al iniciar su producción cinematográfica. Y esos mismos inconvenientes forzosamente habían de presentarse aquí. Sin embargo, se han vencido, en gran parte, con una prontitud que maravilla. El mayor de los inconvenientes nace de la falta de artistas preparados para el arte mudo. Y se dió el caso de que personas que jamás se vieron ante la cámara, realizaron un trabajo que, por lo discreto, merece -sinceras alabanzas. Otro inconveniente, y no de los más nequeños, estriba en la carencia de directores avezados a la cinematografía. Todos sabemos que la dirección es, precisamente, la lave del élxito o del fracaso. Cuba ha progresado mucho en este sentido, y cuenta con buenos directores, que irán mejorando a medida que vayan enmendando los pequeños -errores que en todo inicio se cometen. Si no dedico la presente crónica a elogiar sin reservas la cinematografía cubana, débese principalmente a mi gran deseo de que llegue a ocupar un puesto en el mercado mundial. Habrá quienes no comprendan semejante proceder mio, norque entiendan que el mejor modo de prestarle ayuda es elogiarla sin tasa ni medida. Mi criterio es opuesto a semejante sistema porque la alabanza inmoderada más perjudica que beneficia a aquellos a quienes va dirigida. La critica sana y honrada, la que mira fríamente y aplaude aciertos y señala errores, produce incalculables beneficios al arte. No pretendo echármelas ahora de crítico de altos vuelos. Me faltan para ello muchas cualidades. Pero suplo esa falta con una gran dosis de sinceridad y procuro poner en mis desmañadas crónicas todas las observaciones que una atención firme y decidida me sugiere. En Cuba no se ha llegado todavía al pináculo de la cinematografía. Aún está nor andar mucho camino, y camino espinoso. Pe. ro para mí tengo que se andará. La Golden Sun Pictures acaba de dar una prueba elocuente de esto que afirmo. Enero, 1921 < (De nuestro corresponsal) Su primera producción, “Dios existe”, no es, ciertamente, un modelo en su género. Le falta bastante para ser una obra acabada, aunque es lo mejor que se hizo en Cuba, y es sobre todo una bella promesa de lo que puede hacerse. Tiene mucho bueno y nara eso no han de faltarle mis elogios; pero tiene también algunos defectos, que considero deber de cronista señalar. No se me oculta lo difícil que es encontrar originalidad para los argumentos. Todo está manoseado, y únicamente un gran ingenio pudiera encontrar modalidades y resortes nuevos. El argumento de “Dios existe” tiene de todo, de cuanto hemos yisto en otras películas europeas y americanas. El autor, ha buscado detalles y situaciones en otros argumentos. No crea; copia. Los apaches que presenta son una imitación de los que viven en los bajos fondos sociales de París, con sus luchas canallescas, sus celos bravíos, unidos en el crimen y en la venta de sus criminales servicios. Hay en la película escenas al estilo italiano y escenas al estilo americano, produciéndose con ello un conglomerado que periudica en algo al conjunto de la obra. El asunto esta diluido en numerosas escenas episódicas. Se ve que se han querido buscar efectos en las combinaciones fotoeráficas, magníficas algunas de ellas; pero rue restan a la película valor emotivo. La acción carece de las luchas de pasiones que obligan a suspender el ánimo del espectador y que le llevan a seguir con creciente atención el desarrollo de la trama. Los personajes se doblegan ante el mal que los persigue sin un arranque, sin una rebeldía, sin una lucha para vencer a ese mal. Aun a trueque de extenderme, he intenta Fotografía tomada en los estudios de la “Golden Sun Pictures” — 1 Sr. Ortega, Director de CINE-MUNDIAL; 2 Sr. Villegas, Presidente de la “Golden Sun”; 3 Sr. Samoano, Secretario de la misma compañía; 4 Sr. Quiñones, representante de nuestra revista en la capital cubana. > Pácina 61