Cine-mundial (1923)

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CINE-MUNDIAL ; Cine-Mundial y enCinelandia por Jose M. Sanchez Garcia a E cuenta Owen Moore que la primera película en que intervino fué tan llena de incidentes desagradables que pensó renunciar al Cine: dos de sus compañeros fueron mordidos por un perro rabioso y murieron a consecuencias de ello; al tomar algunas escenas en el interior de una cueva se desató una formidable tormenta que les retuvo tres días sin poder lograr alimento; ya terminada la labor, fué necesario repetir más de cincuenta escenas, porque él había olvidado marcarse una cicatriz junto al ojo izquierdo que era requisito indispensable, y, por último: al estrenarse la cinta se quemó el teatro donde se presentaba. x ko ox AE MURRAY va a registrar los derechos de un minúsculo reloj pulsera de su invención, el cual añade a los usos ordinarios la ventaja de que en él puede leerse la fecha y el estado de la temperatura. El aparato en cuestión es una preciosidad y nọ dudo que en breve logre ponerse en moda. *o ck ox UNE MATHIS, que ha dispuesto para la pantalla numerosos argumentos, entre otros los de las novelas de nuestro famoso paisano Blasco Ibáñez, “Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis" y “Sangre y Arena”, alcanza utilidades increíbles con sus adaptaciones. Es la persona que más ha ganado en ese trabajo desde que la industria cinematográfica (continúa en la página 70) Se puso el señor Sánchez García a jugar a los dados con Gareth Hughes y no sólo perdió hasta la camisa (a ra yas), sino que, a pesar de la oportuna advertencia de Mae Murray, de la “Tiffany Productions”, fué llevado al des pacho de Cecil B. de Mille, de la “Paramount”, que le leyó la cartilla. — Sumiso, contó a Chaplin lo ocurrido y le advirtió a Joseph Swickard — otro actor de quien De Mille es patrón severo — que se anduviera con tiento en eso de las partidas de “siete y media", a las cuales tanto él como nuestro corresponsal, parece que tienen fama de ser en extremo aficionados. ENERO, 1923 < > PÁGINA 26