Cine-mundial (1923)

CINE-MUNDIAL Firpo dejó en Méjico larga estela periodistica O esperaba que a su paso por esta re pública, Luis Angel Firpo no recibiría más que elogios y ovaciones, prodigando los cuales veríase en primera línea a esos señores que escriben al mismo tiempo que el pugilato sólo se concibe entre salvajes, y que Firpo está llenando de gloria a la raza latina con sus puñetazos, aunque personalmente yo creo que lo único que está llenando es su bolsillo de dinero. Para esperarlo, yo me fundaba en sus encuentros con Brennan y MacAuliffe y en el interés con que se leían las noticias de la Habana; por cierto que este interés lo aprovechó un periódico queen todos los números habla de su seriedad, para poner un día en primera plana y con las letras más gordas que encontró, un titulito parecido a éste: “Firpo puesto fuera de combate”. Y después explicaba que un borracho se puso a gritar en la calle que él era el campeón argentino, obligando a un gendarme a hacerlo acostarse, con la intervención del garrote correspondiente, los diez segundos reglamentarios. Pero yo no sabía algo muy importante, que iba a ser la causa de que algunos periodistas las tomaron con Firpo, diciéndonos algunas cosas que hay que repetir, para ilustración de los lectores: que no sabe ni lo que es el pugilato; que Jack Dempsey frustrará sus aspiraciones con una facilidad asombrosa; y, por ültimo, que su pelea con Willard será un timo al candoroso püblico americano. ¿Saben ustedes cuál ha sido esa importantísima noticia que yo ignoraba y que ha hecho caer sobre el argentino esa abalancha? ¡Ah! Pues que Firpo es muy serio; y sobre esto, hay que saber lo que nos dice Jerónimo Coignard: “Firpo llegó, cejijunto, hirsuto, cabizbajo, torvo y feroz. Los cronistas deportivos lo rodearon, llevando a la zaga a los fotógrafos de la prensa. Firpo, en el cuarto de su hotel, se paseaba lentamente, con una poderosa Mrs La gente de pluma arremetió centra el bo xeador argentino por anticipado.— Las pe leas realizadas en la repübiica vieron cum plidas las profecias de Hermida.—Abundan peliculas extranjeras, pero no hubo ninguna nacional. —El Cabildo trata de dar impulso al arte dramático indigena. (De muestro corresponsal Epifanio Ricardo Soto) actitud de alimaña enjaulada, lanzando de vez en cuando, por debajo de las cejas recias y obscuras, ojeadas recelosas. Los periodistas, algunos “sportsman” y no pocos papanatas, lo observaban, con ese aire de medrosa curiosidad que adoptan los desocupados ante las jaulas de las fieras. Y Firpo iba y venía, sañudo, sombrío, supongo yo que con muchas ganas de rugir. Sin embargo, se contuvo, por un prejuicio de racionalidad. Y hasta tuvo extraños roces con la diplomacia.” “Los cronistas volvieron a sus periódicos, y ¿qué dijeron al día siguiente? Que Firpo era intratable, que tenía unas pretensiones más contundentes que sus puños; que se creía una divinidad.” La mala suerte del vencedor de Brennan, o mejor dicho, de su empresario, llegó al colmo con el nacimiento de la comisión de pugilato, que empezó a funcionar ordenando una exhibición con Jim Hibbard, el contrincante del argentino, y Kid Savage, para sa En medio, la hermosa artista Celia Padilla, de Guadalajara. — A la izquierda: Alfonso Martínez Bergés, campeón de boxeo del Estado de Oaxaca. — Escena de “El Demonio”, de Rubinstein, ópera rusa estrenada con gran éxito en el Teatro Iris. — La compañía de Celia Montalván en “Los efectos del Radio”. Para el que juzgue la fotografía sin fijarse mucho en ella, esos efectos deben tener algo de místico. — A la derecha, arriba: Mercedes Navarro en “Una Mujer sin Importancia”. El título de la obra está peleado con la laboriosa actriz que, aunque en esta caracterización no lo parezca, tiene sobrada importancia como mujer. . — Abajo: “La locura de Don Juan”, desarrollándose en el Teatro Municipal. ber a qué atenerse sobre la competencia del primero. Y el resultado fué que Savage volvió loco a Hibbard en los cuatro tiempos en que se vieron frente a frente, por lo cual se deelaró incompetente a éste, anunciándose que sólo se permitiría la lucha con el *toro de las Pampas", sí sus promotores hacían constar que ünicamente se trataba de una demostración de lo que sabe hacer Firpo, y no de lucha formal. Hecho así, sucedió lo que tenía que ser: que Hibbard, después de dejarse perseguir por Firpo, pegándole todos los golpes que tiró en su retirada, hizo que se dormía, o lo durmieron, que de esto no: estoy muy seguro, y el argentino fué aplaudido con una falta de entusiasmo que yo no me esperaba. NS Las buenas películas, han abundado en los cinematógrafos; pero ninguna ha sido hecha aquí, lo cual es suficiente para que pasemos a otra cosa. ENE Para impulsar el teatro dramático mejicano, el Ayuntamiento ha cedido el teatro Fábregas, cambiándole el nombre por el de Municipal, a la compañía de María Teresa Montoya, quien se compromete a presentar determinado número de obras mejicanas. Realmente, ha sido una suerte que un dramaturgo, el señor Jiménez Rueda, figure en el Ayuntamiento, pues sólo así. se concibe que se acuerden de estas cosas. Ya hubo, naturalmente, quien dijera que para escoger las obras que se representen, se tendrá más en cuenta la amistad que su valor; pero a esto se ha contestado que el próximo estreno es de la pluma de una señorita a quien no conoce personalmente, ninguno de los miembros del Ayuntamiento. Lo interesante en este caso será el fruto que dé la temporada, y para hablar de él, hay que esperar un poco más. > PÁGINA 467