Cine-mundial (1939)

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| | sualidad, se pone una papalina sensacional y ' arma unos escándalos que a mí me conmovieron extremadamente porque tuve un amigo a quien con frecuencia rescaté de las garras de la justicia por idénticos motivos—botellas, faldas y una antipatía crónica contra los chinos—pero esos son asuntos personales. Cuando más contento está de la vida, que para él consiste en exprimir hasta la última gota de las canecas de ginebra y en dejarse querer de las muchachas de los contornos y de un perro muy inteligente, sobreviene el diablo en la persona de una inglesa con sombrilla y con hermano (el hermano tiene, aparte de barbas y modales muy sospechosos, la idea de redimir y de civilizar a los indígenas). El paraíso se convierte en infierno para el héroe de la historia. La señorita aquella se interpone entre los lances y en las borracheras. Y, para colmo, resuelve que “las cosas no pueden seguir así” . . . y ya se sabe que eso es el principio de los grandes conflictos, lo mismo domésticos que políticos, y cinematográficos. Si les digo que él y ella acaban por casarse no me lo creerán, pero es la pura verdad ... y lo único que no me cayó en gracia de la película. Yo, de argumentista, obligo a la señora a que se coma el paraguas, con varillas y todo. Pero algún defecto había de notarle a una producción tan entretenida, tan bien hecha y tan soberanamente interpretada. Recomiendo: la escena de la declaración de amor; la del protagonista atravesando, a paso de carga, el mercado del pueblo; todas las que tiene a su cargo el perro; la de Elsa Lanchester y sus “discípulas” en la escuela en que ella les hace cantar himnos y pronunciar el inglés— cosas ambas absurdamente típicas y difíciles— y la de la destrucción de la tienda del chino. Además, encabezo la lista de los que voten por esta película como una de las mejores de la temporada.—Guaitsel. KENTUCKY! . (20th Century-Fox) Uno de los atractivos de esta pelicula es que ha sido tomada en colores. Las peliculas policromas todavia constituyen una novedad, y hasta la fecha no sabemos que se haya filmado ninguna cinta de carreras de caballos en “tecnicolor.” Las blusas de los “jockeys,” las banderolas que ondean en los palcos, los vestidos femeninos, lo abigarrado de la multitud contribuye a prestar colorido, y por eso se diria que “Kentucky” es una pelicula mas para ver que para despertar emociones. Sin embargo, la figura central, Walter Brennan, la de un viejo de Kentucky, irrascible y simpático, que conoce la calidad de los caballos de carreras por lo que reflejan los ojos, es una figura muy humana con la que vive el espectador, y uno lamenta que desaparezca en las últimas escenas de la cinta. Por lo demás, la consabida historia de las dos familias que se odian, de los últimos vástagos de estas familias que se quieren—y estos son Loretta Young y Richard Greene—en agradable combinación con la famosa carrera de caballos, “Kentucky Derby,” en la que se disputan el premio “Postman” y “Blue Grass,” pertenecientes, como se puede suponer, a cada una de las dos familias rivales. Como en el cine hay que ser galante, naturalmente se le concede el triunfo al caballo de Loretta Young. La actuación no deja nada que desear, la dirección es adecuada y la fotografía limpia y brillante. Película que gustará mucho en la Argentina donde tan aficionados son a los caballos, y que gustará igualmente en otras partes en que entretengan al público los amores, sin gran trascendencia, de dos jóvenes que viven al margen de las cuadras y del hipódromo, que Marzo, 1939 Acentúe su personalidad con una SONRISA FOTOGENICA Si usted quiere que resalten sus encantos personales y que luzca radiante su sonrisa— use Kolynos. Haga esta prueba: Use un centímetro de Kolynos en el cepillo seco y vea lo pronto que devuelve el brillo natural a sus dientes. llumine su sonrisa con Kolynos Dolores Casey que aparece en “Artistas y Modelos en Montmartre” , Película de Paramount. LA CREMA DENTAL. antiséptica a KOLYNOS es, dicho sea de paso, la vida y el alma del estado de Kentucky.—Pego. "LA HORA RADIANTE'' (M-G-M) Hace tiempo que Joan Crawford no tenía un motivo de lucimiento más justificado del que se la ofrece en esta película, magníficamente dirigida por Frank Borzage. El reparto es soberbio. Con Joan Crawford aparecen Margaret Sullavan, Robert Young, Melvyn Douglas y Fay Bainter. El conflicto es importantísimo. Melvyn Douglas, primogénito de una familia de rancio abolengo, cuyo jefe actual es una hermana solterona e intransigente, se casa con una artista de cabaret a la que trae a vivir a la casa solariega de Long Island donde habitan la hermana en cuestión y el hermano más joven, Robert Young, con su esposa, Margaret Sullavan. El hermano joven es también francamente opuesto al matrimonio. La esposa se entrega pronto al encanto de la recién llegada, queriéndola sinceramente y sin reserva, mientras la hermana mayor le hace la vida imposible por todos los medios. Y la vida va corriendo en la lujosa mansión, llena de desasosiegos para la recién casada, hasta que surge el drama inesperado. El hermano menor se ha enamorado locamente de la cuñada; y ella, casada sin amor, siente que ha llegado el momento definitivo en su vida. Pero logra vencer la tentación, huye dejando el campo libre a la dueña legítima del amado. La solterona comprende al fin la nobleza de espíritu de aquella a quien consideró siempre como una intrusa, y es ella la que obliga al hermano a correr en busca de ella. Todo es humano, todo Página 113