Cine-mundial (1943)

Record Details:

Something wrong or inaccurate about this page? Let us Know!

Thanks for helping us continually improve the quality of the Lantern search engine for all of our users! We have millions of scanned pages, so user reports are incredibly helpful for us to identify places where we can improve and update the metadata.

Please describe the issue below, and click "Submit" to send your comments to our team! If you'd prefer, you can also send us an email to mhdl@commarts.wisc.edu with your comments.




We use Optical Character Recognition (OCR) during our scanning and processing workflow to make the content of each page searchable. You can view the automatically generated text below as well as copy and paste individual pieces of text to quote in your own work.

Text recognition is never 100% accurate. Many parts of the scanned page may not be reflected in the OCR text output, including: images, page layout, certain fonts or handwriting.

TERPSICORE.—¡Albricias! TODAS.— ¡Albricias! TRON.—(ap.) Veo que mi llegada les causa alegría. Troncho; “al aprovechen” y que no se diga. (A ellas.) ¿Tanto os place y presencia? UNAS.—Mucho. OTRAS.—Muchísimo. CALIOPE.—Vivimos tan solas y tristes. MELPOMENE.—Tú no puedes figurarte lo aburrida y, a menudo, trágica que resulta la vida de nueve mujeres en la soledad de un monte. TRON.—(Sentenciosamente.) A veces, lo mejor y más esencial de la vida está en la soledad y en lo monótono. ERATO.—Pues yo tengo entendido que lo más interesante de la vida está en el Amor. TRON.—Asi es: Y, sin embargo, ¿no es la soledad lo que prefieren los enamorados? Y, finalmente; ¿a qué se reduce el Amor, sino a la monótona repetición de las mismas palabras, de los mismos gestos y de los mismos actos. CLIO.—(Suspirando) ¡Ay; cuanto daríamos nosotras por saber lo que es amor! regocija mi TRON.—Pero. . . . ¿no lo sabeis todavia? CLIO.—No; explicanoslo tú. TRON.—¿Que yo os explique. . . . Bueno; pues oid. (Música.) El amor es falso rito de cursi nomenclatura. Es un perfumado mito y es un carnal apetito que se acaba con la hartura. Calentura que achicharra y nos hace tragar quina. El que, al son de una guitarra, de noche nos acatarra por cantar en una esquina. Ladrón que el sueño nos roba. Duro Juez que nos condena dándonos, por darnos coba, por calabozo una alcoba con “esposa” y con cadena. Amo que nos avasalla. Adalid sin compasión que, sin rodela y sin malla, nos hace entrar en batalla abrazados a un “pendón.” Hambre que hace masticar y roer dura “costilla.” Déspota que hace empujar un cochecito y fregar los suelos y la vajilla. Tirano que nos maltrata y nos hace padecer. El verdugo que nos mata y el dictador que nos ata, por burros, a una mujer. Señor Feudal que se irrita si encuentra competidor; al que un escote lo excita, un beso lo resucita у... lo mata un mal olor. (Hablado.) ¿Qué os parece; os gusta la canción? URANIA.—No está mal. CLIO.—Como canción . . . pasable. ERATO.—Eso, no deja de ser “música.” Página 116 ¿Verdad, Euterpe? EUTERPE.—Y de estación hispana. TRON.—Pues en Nueva York ha tenido un éxito loco. URANIA.—Dejémonos de músicas ¿que hacías por el aire? TRON.—Maromas . . . volantines. URANIA.—¿Cómo? TRON.—Nada; que necesitaba inspiración y salí a buscaros. URANIA.—¿Y como acertaste a caer aqui? TRON.—No fui yo, fué la cabalgadura; mejor dicho, el aparato, el . . . Caproni ese que se nego a seguir funcionando. Gracias a que acuatizamos en ese río, que si no... . TALIA.—Pues has tenido doble suerte al caer ahi, porque ya sabes que esas aguas dan inspiración. | TRON.—Con tal que no me den más apetito. TALIA.—; No te sientes, ahora, más inspirado? TRON.—Por ahora, nada más que empapado. POLIMNIA.—¿Quieres que te “soplemos.” TRON.—No molestaros; ya me iré secando poco a poco. URANIA.—¿Y vienes para mucho tiempo? TRON.—No lo sé. Todo dependerá del trato que me deis. URANIA.—Te trataremos como a un hermano. CLIO.—A cuerpo de rey. ERATO.—Como a un Sultán. POLIMNIA.—Aquí mandas tú. TRON.—¿Que aquí mando yo? TODAS.—Si, síí. . . . TRON.—Está bien: Por lo pronto necesito comer algo y cambiarme de ropa. y dinos: URANIA.—Bajemos al valle y traigamosle frutas. TALIA.—¿Y la ropa, dónde encontrar ropa para él? URANIA.—Tal vez en los Campos Elíseos. TRON.—Mejor en la quinta Avenida. URANIA.—Vamos primero por la fruta. Y tú puedes entrar a descansar en cualquiera de nuestros templetes. Pronto volvemos. TRON.—Yo, mientras, voy a grande, muy grande, comunicaré. URANIA.—Hasta muy pronto. TRON.—Hasta luego, ingenuas y serviciales Musas. Las Musas hacen mutis y, tan pronto desaparecen, vuelve Caliope, coge a Troncho por las manos y le dice mimosa y tiernamente: Escena VII. CALIOPE.—Si tienes necesidad de hacer un discurso . . . háblame a mi. (Suspira, lo suelta y desaparece después de enviarle un beso.) (Escena VIII. TALIA.—(Haciendo el mismo Caliope.) planear algo que ya os juego que Si quieres escribir una comedia ..., cuenta conmigo. (Mutis como el anterior.) Escena IX. MELPOMENE.— (id. de id.) Si te da por lo trágico . . . avisame. Escena X. POLIMNIA.—(id. de id.) Si deseas componer una Oda... , dimelo. Escena XI. EUTERPE.— (id. de id.) No olvides que la que preside lo lírico, soy yo. Escena XII. ERATO.— (1d. de 1d.) Si prefieres lo erótico . Escena XIII CLIO.— (id. de id.) . . llámame. Para lo histórico y hasta рага... lo tradicional, nadie te servirá como yo. Escena XIV. TRONCHO.—(Viéndolas alejarse.) Esto marcha viento en popa. Troncho; tu suerte está echada y, junto al fuego, la estopa; y aunque calado y sin ropa, la partida está ganada. Escena XY. TERPSICORE.—Troncho; Dispensa que venga a distraerte, pero eso del amor me tiene intrigada. TRON.—¿Y deseas... ? TERPSICORE.—Que me lo expliques mejor. TRON.—El amor no es para explicado. El amor, bellisima e inexperta musa, hay que sentirlo. TERPSI.—PUES hazmelo sentir. TRON.—¡Zambomba! (Zalamero.) mucho interés en ello? TERP.—Bastante. TRON.—Ese es un buen sintoma; por ahi se empieza. (Mirando a todos lados.) ‘Ven; sentémonos aquí. Este verde cesped nos brinda, para el caso, mullida alfombra. ¿Tienes (Se sientan.) Ahora dame esta mano y pégate a mí, así. TERPSI.—¿Y, qué hago con esta otra mano? TRON.—Ciñe mi cintura; mírate en mis ojos y piensa en las dulces mieles de un beso . ¿Que sientes, mujer amada? ¿Por qué no me besas, di? ¿No te quema mi mirada? ¿No sientes, musa adorada, : nacer el amor en tí? TERPSI.—Ay, Troncho; siento picor. TRON.—¿En dónde? TERPSI.— En las pantorrillas. TRON.—No temas, que es un hervor de la sangre. Es el Amor que empieza a hacerte cosquillas. TERP.— (Desasiéndose.) No es amor; nos engañamos. TRON.—Es el amor . . . picotero que, hace que, picor sintamos. 'TERPSI.—(Levantándose.) No, 'Troncho; ез que nos sentamos encima de un hormiguero. (Se rasca.) TRON.—(Levantándose.) Demonio; pues es verdad. (Rascándose.) Y, que atacan como fieras. TERP.—(Rescándose con desesperación.) Qué picor, qué atrocidad. ¡Ay! Troncho, por caridad. . . . TRON.—¿ Te rasco? TERPSI.— Como tú quieras. (Se oyen gritos y voces pidiendo socorro.) TRON.—¿Qué sucede? TERP.—Son mis hermanas que deben estar en algún apuro; en un gran peligro tal vez. 'TRON.—; Y qué peligro puede ser ese? TERP.—Tu no sabes que todos estos valles están poblados por Sátiros y Fáunos. TRON.—Y, ¿por qué no me lo dijeron? TERP.—Ahí vienen. Escena XVI. (Van apareciendo las musas, jadeantes, con los vestidos en desorden; pero no muy asustadas, como no tomando el incidente muy en serio.) MELPOMENE.—¡Ay; qué susto! EUTERPE.—j Qué bestias! CLIO.—¡ Valientes animales! (Continuará en el numero de Abril) Cine-Mundial