Cine-mundial (1943)

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Al cabo de otro par de semanas el representante del estudio convenció a Bernard Shaw para que fuera con él a ver una película americana a un salón de proyección de un estudio de Londres. Figuraba en ella un artista que tal vez pudiera representar a Shaw en la pantalla. Se trataba de “El Hombre que vino a Cenar” y el representante presentó la película sin mostrar el título ni la lista del elenco, y comenzó la proyección sin que Bernard Shaw tuviera ni la más remota idea de cuál era la película que iba a ver. A las pocas escenas, el impetuoso Bernard Shaw se levantó de su asiento, exclamando con tono enérgico: —No quiero ver más. Ahora mismo voy a ver a mis abogados para que pongan un pleito a ese hombre por atreverse a retratarme en la pantalla. Como consecuencia de este incidente, Monty Woolley tendrá, sin discusión, el papel de Bernard Shaw en la película de la 20th CenturyFox. María Montez, la bella “Scherezada” de la película de la Universal “Las mil y una noches,” que por cierto es en estos momentos la compañera inseparable de Orson Welles, que por los bellos ojos de María parece haber olvidado los mo menos bellos de Dolores del Río, hacía compras esta semana en uno de los mercados de la ciudad, donde al no encontrar nada de lo que quería, no pudo menos de protestar con un gesto de impaciencia: —Ni mantequilla, ni huevos, ni carne. La vida se está haciendo muy difícil. A lo que el dueño del mercado que la servía la contestó con ribetes de filósofo: —Es cierto, señorita, la vida se está haciendo muy difícil. Pero creo que todos debemos tener en cuenta, que es mucho más difícil aprender a hablar japonés. A lo que María Montez asintió, marchándose muy complacida de la tienda con tres huevos y un manojo de zanahorias para su cena. En el estudio de la Columbia acabamos de saludar al hombre más feliz del mundo. Es él el representante del Congreso del Perú y prominente exhibidor cinematográfico de la república peruana, Manual B. Montesinos, que durante las seis semanas últimas ha estado convertido en el personaje más popular de Hollywood. A Montesinos, que se ha llevado de calle con su simpatia a los astros y a las estrellas de más renombre, acaba de hacerle feliz Charles Boyer con un sencillo presente. Sabiendo que Montesinos es coleccionista de cajas de fósforos, Charles Boyer le presentó una fosforera curiosísima, que hizo grabar con su nombre, expresamente para Montesinos. Pero el exhibidor peruano no es solamente feliz por esto. A nuestro juicio es feliz porque puede enorgullecerse de poseer una joya, о mejor dicho dos joyas valiosísimas y sin par en el mundo: un maravilloso reloj de pulsera y un bellísimo anillo, de delicadísimos mosaicos indios tallados en oro, de valor incalculable, como jamás hemos visto. Para nosotros la figura de Montesinos tiene una doble atracción; la de su brillante personalidad y la de que nos ha confesado espontáneamente, sin sospechar que tenemos relaciones con CINE-MUNDIAL, que nuestra revista es la de su predilección hace muchos años y que es un decidido y ferviente admirador de tres de sus componentes: Elena de la Torre, Hermida y Guaitsel. Mis simpáticos compañeros de redacción están, pues, en deuda de gratitud con el no menos simpático peruano Manuel Montesinos. ‘Marzo, 1943 Cuando el. Club de la Prensa entregó los premios de las “manzanas de oro” a Rosalind Russell y a Cary Grant por su colaboración, Cary pronunció un discurso humorístico, en el que dijo entre otras cosas: “Le tengo un poco de miedo a esta manzana que me entrega Rosalind Russell. Al primer hombre que tomó una manzana de manos de una mujer, le ocurrieron desde aquel momento una serie de apuros y calamidades, que son para poner en guardia el ánimo del más templado.” El Régimen de Jeanette MacDonald Las personas que no quieran engordar no tienen más que seguir el régimen impuesto a Jeanette MacDonald por un famoso doctor, que consiste en cinco comidas diarias, en las que se hallan todas las vitaminas y calorías necesarias para el perfecto mantenimiento del organismo, sin añadir kilos de peso. He aquí el sencillo régimen, tal como nos lo explica la artista de la Metro: Para el desayuno: jugo de naranja, café y una tostada. ENNOBLEZCAMOS NUESTRA AMISTAD DEFENDIENDO LA LIBERTAD A media mañana: dos tazas de sopa de puré de vegetales. A la hora del almuerzo: ensalada de legumbres verdes, un panecillo con mantequilla, un vaso de leche y un postre ligero. A media tarde: un vaso de jugo de tomate con galletas o con un emparedado delgadito. A la hora de la comida: un plato de carne, dos vegetales, una pequeña porción de papas y un postre ligero. Gracias a esta dieta mantiene Jeanette MacDonald su peso constante, sin preocuparse nunca de ganar o de perder libras. El experto de maquillaje de la Metro nos da algunas ideas de belleza, muy fáciles de seguir y muy prácticas para las damas. Jack Dawn, el experto a que nos referimos, tiene a su cargo el cuidado de Norma Shearer, Hedy Lamarr, Greta Garbo, Joan Crawford, Myrna Loy y otras artistas no menos famosas, y asegura que las antiguas recetas de belleza que nos legaron los egipcios y los griegos, son las más eficaces, aún en los tiempos modernos de preparaciones químicas. Dawn nos señala el cutis nacarado de Norma Shearer como el ideal de la mujer. Esta actriz по usa nunca maquillaje ante la cámara y la basta con empolvarse ligeramente el rostro, aplicándose el lápiz de labios. La pigmentación de su piel es tan perfecta que no necesita de más para fotografiar admirablemente. Página 135