Mensajero Paramount (1931-1932)

Record Details:

Something wrong or inaccurate about this page? Let us Know!

Thanks for helping us continually improve the quality of the Lantern search engine for all of our users! We have millions of scanned pages, so user reports are incredibly helpful for us to identify places where we can improve and update the metadata.

Please describe the issue below, and click "Submit" to send your comments to our team! If you'd prefer, you can also send us an email to mhdl@commarts.wisc.edu with your comments.




We use Optical Character Recognition (OCR) during our scanning and processing workflow to make the content of each page searchable. You can view the automatically generated text below as well as copy and paste individual pieces of text to quote in your own work.

Text recognition is never 100% accurate. Many parts of the scanned page may not be reflected in the OCR text output, including: images, page layout, certain fonts or handwriting.

Mgnscyera tyarammuit tado y a la cual cree el hija de Mrs. Tanner, es catastrofe superior a las fuerzas de Harold Horne. Se atolondra. No sabe como salir del aprieto. En vista de que la tierra, sorda a sus deseos, no se abre para tragarselo, procura ocultar el rostro lo UNA TEMPESTAD DE CARCAJADAS, UN MAR DE RISAS, UN CICLON DE HILARIDAD ANTE EL CUAL NO RESISTE NADIE mejor que puede. . . Tal es su confusion que, sin notar que quien la motiva no se halla ya presente, cuando trata de poner a Mrs. Tanner un zapato, usa el calzador por el extremo opuesto al que debiera, y no halla despues como sacarlo del zapato que calza la digna matrona, la cual queda de este modo como gallo con espuela postiza. — i Es usted un atrevido ! — bufa la dama encolerizada. — Perdone, senora, — suplica el cuitadisimo Harold Horne. — El honor de haber tenido en mis manos los pies de la esposa de mister Tanner me ha dejado turulato. Aplacase la iracunda con la lisonja, mas no cesa por ello la confusion del pobre mozo, que ahora, al anudarle los zapatos, hacelo tan torpemente que los deja atados uno con otro, de lo cual resulta que Mrs. Tanner, al levantarse, de dos o tres saltitos y se vaya de bruces. — Gracias que pesa usted menos que una pluma, de los contra 1 ~ rio hubiera podido las timarse. . . — insinua Harold a tiempo que, rendido por el peso de Mrs. Tanner, la conduce cuan delicadamente puede a su asiento. HAROLD LLOYD jAy, Que Me Caigo!” Production de Harold Lloyd Cor poration Distribution Paramount BARBARA KENT VUELVE LOCO OTRA VEZ HAROLD LLOYD k. 1 1 ii I VERSION MUDA VERSION SONORA con ROTULOS EXPLICATIVOS EN ESPANOI — Me he puesto a regimen para adelgazar — contesta la ponderosa dama a quien la nueva lisonja hace olvidar el percance que por poco la deja sin narices. Celere, diligentisimo, Harold Horne des calza a Mrs. Tanner, se dispone a calzarl PAG IN A