Mensajero Paramount (1931-1932)

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“Las Mgnsafera paramount Luces de Buenos Aires’’ Narration I A Argentina. En j la cocina de un rancho, los gauchos y los peones reposan despues de una jornada de trabajo duro y escuchan, llenos de entusiasmo, a Elvira, la mejor cancionista del barrio que dice para ellos una cancion, acompanada por las guitarras. Su hermana Rosita la hace saber que corre peligro su voz, empleandola en una atmosfera tan cargada de humo, y que debe reservarla para el publico de Buenos Aires, el unico que algun dia ha de darle toda la fama que merece, mientras ella, a su vez, sera tambien, la reina de la danza. Llega el propietario del rancho y pide a aquella, que cante mas ; la ama locamente, bien a pesar de su hermana que jamas consentiria en verla esposa de un gaucho cualquiera, tan enemigo del arte y de la cultura, aunque por otra parte sea dueno de mucho dinero. . . Cerca de la casa, un automovil, acaba de hundirse entre el lodo. En el viaja el director de un gran teatro de Buenos Aires, llamado Carrasco, con su amiga Lily y el secretario. Recorre los alrededores de la ciudad buscando numeros ineditos para su revista criolla, que quiere presentar del modo mas nuevo posible. El chofer trata de poner el coche en marcha, mientras PARAMOUNT presenta “LAS LUCES DE BUENOS AIRES” con CARLOS GARDEL, SOFIA BOZAN y GLORIA GUZMAN Segun la obra original de Manuel Romero y Luis Bayon Herrera Direccion de Adelqui Millar Musica tipiea de Mateo Rodriguez con el concurso de Julio de Caro y su orquesta tipiea argentina Ted Pahle, Fotografo Es un film Paramount hablado y cantado en Castellano Sistema Sonoro Western Electric REPARTO Anselmo Carlos Gardel Elvira Sofia Bozan Rosita Gloria Guzman Pablo Pedro Quartucci Empresario Carlos Baena Villamil Kuindos Marita Ar co Vicente P> ualdo Jorge In >tario Jose Ag alguien, a lo lejos descubre una luz y deciden todos dirigirse hacia ella para suplicar refugio. Llegan a la casa y cuentan su aventura. El propietario, a quien le han sido agradables, les invita a quedarse durante la noche. Una sirvienta vieja prepara el mate. La apariencia de esta bruja desdentada no inspira mucha confianza a los viajeros, pero pronto se dan cuenta de que tienen que andar con tiento, porque todos los gauchos estan fuertemente armados. El propietario vuelve a proponer a Elvira que cante para distraer a los recien llegados ; Rosita a reganadientes, despues de enterarse que entre ellos se halla el director de un gran teatro, da su consentimiento, aconsejando a su hermana que haga una seleccion de los numeros por si fuera posible un contrato. * * * Las dos hermanas preparan sus equipajes. Marchan a Buenos Aires. * * * Elvira y Anselmo, el propietario de la casa, tienen la ultima entrevista, para decirse adios. El hace la promesa de no olvidarla nunca, porque la quiere de verdad. Todos los vecinos se han reunido para despedirlas. Llegan los guitarristas, tambien. Uno de ellos trae medio cordero asado. Otro, un par de gallinas vivas. Anselmo entrega una rosa blanca a Elvira, rogandola que la guarde hasta que el mismo vaya a pedirsela. El tren arranca. Una vez en el depart amen to, mientras ellas comentan algunos momentos graciosos de la despedida, la grasa del cordero asado cae, gota a gota, sobre la cabeza de un viajero, distraido. Elvira se asoma a la ventani11a con la rosa en la mano. El viento se la lleva. Rosita, al verlo, asegura que con aquella flor se va tambien el pesado fardo de todos los recuerdos anteriores. >k * % En el teatro, Rosita tiene algunas difi P AGIN A 2$