Mensajero Paramount (1931-1932)

t Mgnsajero paramount de ella, siendo nina, y la cuenta el argumento de una cancion que tiene en el repertorio. Ricardo prepara a Emilia una entrevista con Roberto, para ver si ella consigue hacerle mentir. Despues se esconde con sus companeros tras de una cortina, desde donde escuchan la conversacion. Emilia pregunta a su novio acerca de las re ■ laciones de su padre con Mabel y el procura defenderse, sin caer en la mentira. Entonces, ella llorando le dice si en realidad su padre es un sinvergiienza. Roberto compadecido, para consolaria, responde que, no. De entre las cortinas salen Sil van y Ricardo gritando : — Idas mentido. Cuando Roberto esta convencido de que ha perdido la apuesta, llegan los obreros del jardin, protestando porque son las cinco y media y no les han pagado. El reloj del hall marca todavia las cinco. El novio de Emilia pregunta por telefono, al observatorio, la hora exacta, y efectivamente, le dicen que son las cinco y media, asi que la mentira la ha dicho despues de haber vencido las veinticuatro horas. Ha ganado la apuesta. Entonces, comienza a mentir para disculpar a Lamberti y arreglar su asunto con Las Espanolitas . . . — El senor Lamberti es un hombre honrado. . .Incapaz de faltar a sus deberes matrimoniales. . . Siempre ha sido fiel a su esposa... Siempre... En este momento entra Lamberti abrazado a la criada. teur en scene? — Es el autor de Las Luces de Buenos Aires. . . ■ — Efectivamente. — Colabora conmigo, la Serranito. ;Tambien sabe quien es? — ; Como no ? ... La he visto en La Incorregible, donde hace una soberbia creacion. . . — Cierto. Un cronista entrevista a Manuel Russell del reparto de la cinta La Pura Verdad Sentado, a la sombra de los robles, en el jardin suntuoso de Paramount City, pasaba las horas, sin saber que hacer. A mi lado, disfrutando del mismo bienestar, otras personas, estrellas y figurantes, charlaban y reian, comentando de vez en cuando exitos y fracasos, pintorescamente. De pronto, el viento, fresco y acariciador, trajo hasta mi, el eco frivolo de una cancion moderna que consiguio distraerme : j Ese, es Manuel Rusell ! — me dije. Conocia perfectamente su voz. Y corn hacia la sala de musica, contento, porque iba a tener la suerte de saludarle. Cierto : alii estaba nuestro querido amigo, ensayando unos numeros originales, del film que rueda en la actualidad . . . — i Cuanto tiempo sin vernos ! — fue el primer saludo. — No sabia que habia vuelto usted a Joinville, — le conteste. — Pues vive usted muy atrasado. Estoy trabajando desde hace dos dias. Hago La Pura V erdad, una adaptacion, graciosisima, de Munoz Seca, que dirige Manuel Romero. ; Le conoce a este met Y — Me habian dicho que no pensaba usted volver al cinema . . . — :j Que locura ! Es lo unico que me alienta a vivir. Toda mi ilusion esta en el toqui. Nada seria ya sin el . . . — Despues del exito que ha obtenido en Su Noche de Bo das, lo comprendo. . . — Pues en esta pelicula estare mejor. Aqui va todo mi entusiasmo. Asi me gusta. ; Quienes son los otros artistas que trabajan? — Maria Bru, Goyita Herrero, Pilar Casteig, Jose Isbert, Jose Soria, Pedro Gonzalez, Manolo Vico, Valdivieso, Fredy Castel, etc. . . Todos muy buenos. Algunos pertenecen a la Compania del Infanta Isabel. — ;Y esta usted contento en Paramount ? — No pienso salir de esta casa, mientras mi trabajo sea del agrado del publico. — Lo es. — No podemos decirlo aun. — Ya se que prepara usted agradables sorpresas . . . — Y para pronto. Manuel Rusell, sigue cantando. Vuelvo a mi sitio, en el jardin, a la sombra de los robles, hasta donde llego, de nuevo, el eco frivolo del mismo cuplet. Al lado de estrellas y figurantes, que continuaban charlando y riendo, alegremente. Algunos comentaban esta vez : — Bonita voz la de este chico . . . — Es un gran artista . . . — Le espera un porvenir brillante. . . — Lo merece todo . . . la musica se fue esfumando. P AGIN A SI