Mensajero Paramount (1927)

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Mensa/era tfaramMint <( MADAME POMPADOUR" ARGUMENTO Narración de José Liado de Cosso "^ L rey ! ¡ viva el rey ! gritaba la muche 1 1 , dumbre descarnada y mísera — ¡ viva el Muy Amado! ¡viva el Rey Sol! V en el pavimento resonaba, con acompa« lo repiqueteo, el golpear de los cascos de 1 caballos de la guardia, y oíase el chirrido í ridente de las ruedas de la real carroza, ( itro de la cual se perfilaba el continente Serbio del más pomposo y corrompido de ] s monarcas : fcis XV. Lleno aún el k e con el polvo Imantado por la k 'roza, un nuegolpear de ■seos y chirriar I ruedas exal ■ )a a las multi ■ des nerviosas I mal nutridas, Iro, con esa vota ilidad tan lopia de las masas populares, ya no sa|n de las gargantas roncas y aguardentols los mismos gritos cariñosos de poco ites. — ¡ Muera la Pompadour ! . . . ¡ Muera la uhana y la envilecida ! . . . ¡La que nos qui| el pan de la boca ! . . . ¡ Muera ! . . . ¡ Mue I . , , Y de la acera, saltaba al estribo de esta ¡ra carroza un muchachote grande y fuerte, !en formado y de rasgos apolíneos, que con istos violentos apostrofaba a la favorita ■m las palabras más soeces e insolentes de nada fino vocabulario. Era Laval, un artista del barrio, un exal'do idealista que luchaba a brazo partido n la suerte para ganarse el pan nuestro de .da día, lográndolo unas veces, pasando ; unbre las más, y todo, según él, por culpa j: aquella aventurera que al robarle el coiizón al rey había robado la felicidad de *da Francia. I La Pompadour lo mira, tiene que mirarlo | la fuerza, porque aquellos ojos fulmínanos con anatemas de fuego parecen hipnoti|(jirla. al punto de quitarle la voluntad y ista el sentido, y mientras la carroza se aleja al galope de los caballos que todo lo embisten y atrepellan en su carrera, la de Pompadour sigue viendo mentalmente aquellos ojos, aquel pecho desnudo y aquellos brazos fornidos, que se encuadraron en el marco dorado de la portezuela, y, entornando los ojos y abandonándose muellemente al cariño de los almohadones, piensa en el pintor, y piensa ... y piensa . . . British National Pictures Limite» Présenla a DOROTHY GISH e n "MADAME POMPADOUR" con ANTONIO MORENO Dirección de HERBERT WILCOX Asunto tomado de una obra de RUDOLPH SCHANZER y ERNEST WELISCH Adaptación a la pantalla por FRANCÉS MARIÓN Distribución Paramount REPARTO Madame de Pompadour Dcrothy Gish Rene Laval Antonio Moreno Luis XV Henri Bosc Maurepás Gibb McLaughlin Duque de Courcelette Nelson Keys Gogó Cyril McLaglan Madame Poisson Marsa Beauplan Belotte Marie Ault Prunier Tom Reynolds lililí El rey de Francia tuvo que abandonar temporalmente la corte para atender a las funciones de una importante misión de Estado, pero el rey, como todo enamorado, era celoso, temía que cualquiera de aquellos de sus subditos que no le alcanzaban en majestad ni en realeza pudiera robarle, sólo por capricho del corazón, lo que fuera el mayor tesoro de su reino, y, antes de partir, confiólo a quien él suponía habría de saber guardarlo con mayor celo ; confiólo a la protección de Maurepás, el enemigo más encarnizado de la favorita, porque, como con notable astucia razonaba, ¿quién podría vigilar más despiadadamente a una mujer que aquel de sus enemigos que más la odiara? Pero la Pompadour era la Pompadour, y a su lado Maurepás no era otra cosa que un pobre diablo. No tardó la favorita en averiguar el retiro del pintor revolucionario, y, disfrazada convenientemente, hízose acompañar por su fiel servidor Gogó al mesón de Prunier, donde aquél vivía. La llegada de la favorita no pudo ser más tempestuosa. Bastó la presencia de un uniforme de la guardia para que toda aquella PAGINA 13