Teatro Al Dia (July 1936)

La Ventilación del Teatro Para Obtener Efecto Refrescante e Tornemos ahora a la función refrigeradora de los sistemas de acondicionamiento de aire sin compresión, o refrigeración mecánica similar LA INSTALACIÓN de un sistema de ventilación apropiado para su teatro le ayudará a mantener el mismo siempre lleno durante los meses de calor. La ventilación, según la definición que de la misma hacemos en nuestros artículos, incluye toda clase de ventiladores, lavadores de aire, filtros y demás equipo, excepto refrigeración mecánica. El aire es una mezcla mecánica de gases, que contiene por volumen cerca de 79% de nitrógeno, y 20% de oxigeno. El oxígeno es el elemento tan necesario para la vida y la comodidad del hombre. El nitrógeno es un gas inerte que sirve para diluir el oxígeno, ya que no pueden respirar los seres humanos el oxigeno sin afectar los tejidos del organismo. Aquel elemento atmosférico donde se encuentra mayor variación, es el vapor de agua (o humedad). “Tal es su importancia para la ventilación de los teatros, que éste merece toda la atención que se le dé. En el análisis final, el vapor de agua no es sino vapor a una presión bajísima. Sus propiedades, acciones y reacciones son semejantes a las del vapor. Habiendo dejado bien establecido este concepto, debe entenderse claramente que el vapor de agua existe independientemente del aire, y lo afecta únimente la temperatura del aire. Debido a esta mezcla tan intima del vapor y del agua, la temperatura de ambos debe ser igual o casi igual. Cuando la temperatura que marca la ampolla húmeda del psicrómetro es igual a la de la ampolla seca, se dice que el aire está saturado porque a ese punto contiene todo el vapor de agua posible. Si esto es cierto, y sabiendo que la temperatura del vapor de agua y del aire son iguales, de ello se deduce que en cualquier momento en que la humedad relativa es menos de 100%, el vapor de agua que contiene el aire puede considerarse que ha sido recalentado hasta alcanzar la misma temperatura que la del aire, el calor total del aire es la suma del calor del aire y del calor del vapor de agua que contiene ese aire. Recuérdese, que el vapor de agua se encuentra siempre en un estado de recalentamiento excepto al punto en que se satura el aire. El calor del vapor de agua puede dividirse en tres componentes: el calor del líquido, el calor de vaporización y el recalentamiento del vapor de agua. Habiendo dejado esto bien establecido, tal vez resulte más fácil llegar a comprender el 32 efecto refrigerante que produce un lavador de aire cuando se usa (sin refrigeración) para la ventilación en el verano. USO AEREO TODA E LAVADOR DE AIRE CUANDO EL AIRE conteniendo humedad que no ha alcanzado aún su punto de saturación viene en contacto con el agua, como sucede con el lavador de aire, aquél vaporizará parte del agua que ayuda a aumentar el contenido de humedad del aire, hasta que se alcanza el punto de saturación. Ya sabemos que para vaporizar el agua se requiere calor. Por consiguiente, si este alre absorbe humedad, parte del agua debe vaporizarse. Si se vaporiza el agua, debe habérsele aplicado calor; y comoquiera que no se le ha aplicado calor exteriormente, el calor que produce la vaporización debe provenir de por fuerza del calor que hay en el aire, y del recalentamiento del vapor de agua que hay en ese aire. Este calor que produce la vaporización en un sentido se consume y no es sensitivo (llamado generalmente calor latente) ; esto es, que no lo siente uno, y de ello se colije que el aire lo refresca hasta cierto punto la cantidad exacta de calor de vaporización. Esta evaporación del agua del lavador de aire continuará, con su resultante baja de temperatura, hasta que se satura de vapor de agua el aire. Quizás esté en orden, en vista de lo que se discute en el parrafo anterior, que hagamos aquí una comparación clara y precisa entre lo que significa la temperatura de la ampolla humedecida del psicrómetro y el que se forma el rocio. punto dá El punto a que se condensa el aire convirtiéndose en rocio se alcanza removiendo el calor del aire (refrigeración mecánica o por hielo) sin cambiar su contenido de humedad, mientras que la temperatura de la ampolla humedecida del psicrómetro se produce añadiéndole humedad al aire y haciendo que su temperatura baje como resultado del calor de vaporización del agua que se le añade. Consideremos ahora el lavador de aire. El agua de éste se utiliza repetidas veces por medio de una bomba que la saca del tanque y la lleva hasta los pitones de regadera. Debido a esta circulación continua del agua del lavador, su temperatura den tro de un espacio de tiempo relativamente corto llegará a igualar la temperatura húmeda del aire. (Cuando se alcanza esta temperatura, la temperatura que indica la ampolla humedecida del psicrómetro no cambiará, mientras que la temperatura indicada por la ampolla seca de aquél bajara, siempre acercándose a la temperatura húmeda. LA FUNCION REFRIGERADORA Este es el principio teórico sobre el cual se basan los sistemas de ventilación diseñados para crear un efecto refrescante por medio del uso de los lavadores de aire. Francamente, el grado de refrigeración que se obtiene por este método no es muy apreciable que digamos, y en muchos casos es hasta insignificante. En honor a la verdad, se da el caso, durante los meses de calor, que la temperatura del agua del lavador de aire es más alta que la temperatura húmeda del aire, y a veces hasta se acerca a la temperatura seca del mismo. En estas ocasiones, es la opinión del que esto escribe, que parte del calor de vaporización, si no todo, proviene del agua del lavador de aire enfriándose así gradualmente el agua del lavador de aire hasta que su temperatura baja hasta el grado de la temperatura húmeda del aire. Durante este proceso, cuando el agua del lavador de aire se está enfriando hasta el punto que se acerca la misma a la temperatura húmeda del aire, el aire mismo no está recibiendo frio; más bien está calentándose y humedeciéndose más. Esto viene a ser lo mismo que si sopláramos sobre una cucharada de sopa saliente para enfriarla, y ello, claro está, sólo complica la condición atmosférica en el teatro. Cuando prevalezca esta condición (el agua del lavador a una temperatura más alta que la temperatura del aire que indica la ampolla humedicida del psicrómetro), no debe usarse el lavador de aire, y debe dependerse para el efecto mejor posible enteramente del cambio rápido del atre en la sala de espectáculos. El movimiento del aire, además de ser de gran importancia, es una necesidad absoluta. Cuando el aire se estanca el cuerpo humano está rodeado de una capa de aire calido y con frecuencia muy húmedo. Al agitarse el aire aún moderadamente, se remedia esta condición, ya que esta capa de aire se mueve hacia otro lado y nuevo aire pasa a rodear el cuerpo, que se refresca como resultado de la evaporación de la humedad (el sudor) que se forma sobre la piel. El calor de vaporización suministrado por el cuerpo produce un efecto refrescante. Por regla general, mientras más alre pueda hacer contacto con el cuerpo, PEATRO CALIDA